¿Firmarías un 2021 parecido?

 

A priori esta pregunta puede sonar hasta ofensiva, ¿verdad?

Si has sufrido alguna perdida o el virus te ha afectado virulentamente, probablemente no. No se puede frivolizar con el escandaloso numero de muertos y los infinitos duelos que no nos hemos permitido respetar. 

Emocionalmente, es difícil que  firmemos un año igual con todos los miedos,  las incertidumbres,  el aislamiento social, la indignación e incomprensión que nos deja este virus.

Nuestros mayores, en la mayoría de los casos, que después de pasar guerras y penurias, no alcanzan a entender que todo  lo que han  conseguido  al largo de sus años, con su lucha y su sudor, una cosita invisible e imperceptible les ha obligado a encerrarse en sus casas sin poder ser visitados por sus queridos.

Momentos de mucha agresividad y poca comprensión a la hora de mantener las mínimas normas de seguridad

La  dureza  de los  meses de  marzo y abril  en los  que teníamos  que ir a abrir  nuestras  clínicas,  sin información, sin medios, anulando citas y visitas que no fueran esenciales. Prohibiendo ventas que no eran esenciales y quedándonos sin estocaje como si de una guerra se tratara.

 

No obstante,  siendo cierto  lo  antes  mencionado,  algunos  no podemos calificar  de un año  malo. Quizás  podemos hablar  de un año  difícil, pero si  pongo a la  balanza lo  positivo y lo  negativo que nos  ha dejado  este año, no podría decir que no lo firmaría.

En  lo  familiar, hemos  estado más  que nunca con  nuestras  parejas, hijos y mascotas. Hemos aprendido a convivir muchísimas horas con los que más cerca tenemos y en muchos casos las relaciones han salido fortalecidas.

Hemos aprendido a cocinar, a hacer ejercicio, a hablar con la gente …. Y todo a través de una pantalla sin importar la distancia.

En  lo  emocional, nos  hemos dado  cuenta de que hacer planes a largo tiempo no tiene demasiado sentido, y que el cortoplacismo es el entorno más seguro que ahora mismo nos rodea.

Que  quererse no  es lo  mismo que  amarse. Cuantas  más horas  pasas con  los tuyos  más  la  comprendes, más la mimas, más te apasionas y finalmente más la amas.

En  lo  pragmático,   que   con   menos   podemos   ser   igual   de  felices.  Nos  han cuartado  todo  el  ocio,   las  fiestas  tradicionales, las comidas y cenas con los amigos, los viajes, las vacaciones …. Y aún con todo, podemos seguir siendo felices.

En  lo  social,  la  solidaridad  con  todos  aquellos  que  lo  están  pasando  mal. Gente anónima haciendo mascarillas, aportando  más  que nunca  en  los  bancos  de alimentos, alentando a todos nuestros sanitarios que se merecen el monumento más alto que debiera existir.

En lo laboral,  nuestro sector,  aunque ninguneado  constantemente  por nuestros responsables políticos, es un sector fuerte, donde la crisis económica, estadísticamente, no nos está afectando y la crisis  emocional nos ha hecho estar más encima de aquellos que nos necesitaban. 

No diré que hemos crecido, porque hay de todo, pero si que puedo decir que está resistiendo con dignidad comparado con otros sectores que, lamentablemente están sufriendo y padeciendo estas restricciones tan severas.

Ha  sido  un  año  también  donde  la  formación,  de  calidad, la hemos tenido por todos los costados o bien de forma gratuita o  a coste muy bajo y con  gran generosidad  de nuestros profesionales docentes.  Todos los gurús del sector se han volcado a regalarnos horas y horas de sus conocimientos.

Hemos  aprendido  a  trabajar  de  un  modo  distinto:  A  teletrabajar,  a   gestionar  agendas,   a ser  más  asertivos  y  comunicativos que nunca con nuestros clientes. Y porque no decirlo. Algunas veces nos hemos convertido en héroes y psicólogos de aquella gente que le perturbaba la salud de su mascota.

Quizás puede parecer que estas palabras están  escritas  por un necio optimista, pero sin duda, esta zona de confort, que no de comodidad, nos pone más alerta  para afrontar un  2021 con  gran dosis de ilusión y más ganas que nunca de dar lo mejor de todos nosotros.

Sin duda quiero dedicar este pequeño resumen al equipo (familia) de Més que Gossos, que, en muchos momentos de este viacrucis, ha sido un fortín inexpugnable donde TODOS nos hemos sentido seguros.

Y tú, ¿firmarías?